Querido papá,
¿qué tal en este viaje?
Hace tiempo que no sé
nada de ti,
pero no te olvido,
por eso te escribo este mensaje.
Ya hace mucho que partiste.
En el velero que te llevó
no portabas equipaje.
Nos dejaste tus sonrisas,
tu buen hacer y
tu trato siempre afable.
Querido papá,
no me llamas,
¿es que acaso me olvidaste?
Sé que ha pasado ya tiempo
desde que te marchaste.
A veces…
creo percibir tu aroma
o me parece escuchar tu llave.
Papá, te recuerdo mucho.
Navegarás por el Estrecho,
estarás surcando otros mares.
La aurora boreal viste,
en ocasiones a delfines
acompañaste,
exóticos paisajes en tus viajes
disfrutaste.
Y por suerte…
también de tragedias te salvaste.
Tantas historias vividas,
¿recuerdas?
Muchas me las contaste.
Pero papá,
yo te echo de menos.
Aquí, en este cajón
guardo todas tus cartas
y también las postales.
En cuántas noches de insomnio
me acompañan esas letras
cariñosas que desde lejos
me enviaste.
© Yvonne Torregrosa
A mi padre, que un 27 de julio hizo su último viaje, no sé su destino, pero su velero le habrá llevado a los cielos, donde la aurora boreal le iluminará en su larga noche.
¡Capitán Torregrosa , seguiremos tu estela!
Deja una respuesta